El zorro y el invierno

El zorro y el invierno
Atardecer de invierno

Atardecer de invierno. Contraste entre un rojo atardecer y la Cordillera nevada.

El Zorro y el Invierno

Zorro en blanco

Zorro en blanco

El zorro (Vulpes vulpes) es un superviviente. Quizás por eso me guste tanto.

Perseguido sin sentido por cazadores ‘deportivos’ o simplemente por desaprensivos genéricos que, desde la ignorancia, buscan su muerte directamente, buscan sus madrigueras para taparlas, quemarlas, robar sus crías… incluso exhiben con orgullo sus hazañas como si se tratase de una gran proeza, como si gracias a su labor nos estuvieran haciendo un gran favor… y nada más lejos de la realidad.

Para estos individuos que sólo ven en la naturaleza ‘maleza y alimañas’ el zorro es solo un competidor más de ‘no se sabe qué’, pero, para los que amamos la naturaleza por pasión y por formación, el zorro es otro elemento integrador necesario de un todo, un ejemplo de supervivencia, de adaptación a un medio cada día más antropizado que no podrá con él.

En invierno, cuando las condiciones son más duras, el zorro muestra su mayor belleza, y es también más ‘fácil’ observarlo ya que debe dedicar más esfuerzo y tiempo a buscar el sustento diario.

Con un poco de suerte, puedes pasar un gran rato observando el incansable ir y venir, con la nariz pegada al suelo, deteniéndose de vez en cuando y apuntando sus grandes orejas hacia el origen de cualquier pequeño ruido bajo la nieve, por si aquello fuera un pequeño roedor para el desayuno.

Adjunto, además de algunas fotografías de este invierno, un pequeño video donde se ve su acción de caza en la nieve -mi favorita- y cómo espanta a un irritante cuervo, que, por cierto, es casi del mismo tamaño que el zorro!

Espero que os guste.

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