Este precioso habitante de nuestros ríos se acicala cerca de su nido, en un pequeño recodo en el que hubo que pasar varias horas varios días bajo una red, inmóvil, para poder disfrutar de su actividad cotidiana. Grabado en Villaviciosa, Asturias, esta primavera.
Una de mis especies favoritas de entre las muchas que habitan nuestros ríos: el mirlo acuático (Cinclus cinclus). Indicador de cierta buena salud de los cauces, ya que se alimenta de invertebrados propios de aguas 'limpias', puede verse (y oírse) con frecuencia con su típico movimiento sube-baja en alguna piedra que asome en mitad del río, con su llamativo pecho blanco.
