Durante la berrea de este año 2018, año en que hemos tenido menos ocasión para salir a disfrutar la berrea, tuvimos la enorme fortuna de disfrutar esta escena, solos, y bastante cerca, con los últimos rayos de sol de la tarde. La ausencia de viento además nos permitió escuchar el impresionante chocar de las astas, por lo que te recomiendo subir el volumen al máximo.
Probablemente la rapaz nocturna más abundante, aunque no es tan fácil de ver como otras, por sus hábitos eminentemente nocturnos.
No suelo realizar 'crónicas' de salidas de campo, pero en esta ocasión creo que merece la pena. Pocas jornadas más 'gloriosas' recuerdo en todo el tiempo que llevo campeando. No quiero ni imaginarme la sequía de avistamientos que me espera para poder compensar estos días.
Aunque no lo parezca, se trata de un 'pícido', es decir, un representante de la familia de los pájaros carpinteros, sin embargo carece de las herramientas necesarias para taladrar la madera o moverse como los otros representantes de esta familia.
